Cuando el inventor de Internet Sir Timothy “Tim” John Berners-Lee creo la red de redes, poco imaginaba que su invento daría tanto de sí. El concibió Internet como una manera de distribuir e intercambiar información acerca de sus investigaciones de una manera más efectiva y rápida.
Él y su grupo crearon las tres bases en las que hoy nos movemos por la red, el lenguaje HTML (HyperText Markup Language) o lenguaje de etiquetas de hipertexto, su protocolo principal HTTP y como no, la ya famosa URL.
Así pues en Octubre de 1994, algo más de 20 años atrás, fundó el consorcio de The World Wide Web, lo que dio pie a las famosas www que preceden al resto de nuestro dominio en la red.
Pero en 22 años, todo aquello a disparado definitivamente la manera en cómo nos comunicamos e Internet ha ido “mudando” de piel de manera constante e imprevisible.
En primer lugar entendíamos Internet como una forma en cómo las personas nos podíamos comunicar a través de un ordenador y de manera localizada. Es decir podíamos hablar del Internet de las personas, no obstante, la capacidad de Internet de regenerarse a sorprendido, no ya a su inventor, el bueno de Tim, si no a propios y extraños.
De hecho tan solo 12 años después del nacimiento de Internet, pasamos del Internet de las personas, al Internet Móvil, y 12 años después hemos pasado a vivir otra revolución; El Internet de las cosas.
EL INTERNET DE LAS COSAS (IoT)
Hoy en día el IoT es una realidad increchendo. La idea es que Internet no sea una si no muchas cosas, muchos objetos interconectados que nos ayuden con nuestra vida cotidiana de una manera “natural”.
Para entenderlo de una manera práctica, podemos poner un ejemplo, y es que, si los libros, televisores, lámparas, partes automotrices, botiquines etc. estuvieran conectados a Internet y equipados con dispositivos de identificación, no existirían, en teoría, cosas fuera de stock como por ejemplo, medicinas que nos falten o que simplemente estén caducadas, sabríamos exactamente la ubicación y cómo se consumen y podríamos comprar productos en todo el mundo y es más nuestro frigorífico buscaría el mejor precio y lo encargaría para que nos lo trajesen a casa. El extravío sería cosa del pasado y sabríamos qué está encendido o apagado en todo momento.
Según informes recientes podemos ver un porcentaje que nos ayude a ver la inmersión del Internet de las cosas en nuestra vida cotidiana.
Sector de Negocios e Industria, se calcula que actualmente el impacto ya es algo superior al 40%. ¿Pero en que exactamente podemos contar ya con esta tecnología? Obviamente, en procesos que tengan que ver con el análisis en tiempo real, cadenas manufactureras, equipamiento y robótica y diferente maquinaria que nos tengan conectados para poder controlar diferentes campos y métricas en nuestro trabajo diario.
Sector de la Salud, en este campo la innovación es tremenda en la última década, equipos médicos han conseguido gracias a la conexión con la red realizar operaciones con exactitud milimétrica con robótica conectada a cientos, miles de kilómetros del lugar de operación.
Pero además la idea es que nuestras necesidades básicas a nivel de salud estén conectadas mediante los famosos Wearables, cada vez más presentes, y lo que es más importante, controlados, de hecho ya muchas aplicaciones móviles lo permiten, a un equipo médico o a tu portafolio médico en todo momento.
No cabe duda que en este campo la implicaciones pueden ser interminables, la implicación del IoT en la medicina hoy en día ya es de un 30,3% aproximadamente.
En el Sector Retail, el implemento está ya marcando un claro camino ascendente. Los SmartPhones, el Mobile E-Commerce, el Big Data resultante de saber el gusto de los consumidores y el seguimiento de inventarios hará de esta tecnología que se crezca a un 8,3%, pero se prevé que su implantación será abrumadora en pocos lustros.
Sin ir más lejos, Tecnologías como los Ibeacons, patrocinada por Apple, pequeñas balizas Bluetooth que se comunican con tu móvil al entrar en una tienda o en unos grandes almacenes, nos dicen todo lo que necesitamos saber sobre el sitio, nos aconsejan que comprar, las ofertas que hay y según nuestros gustos, que previamente hemos dado a conocer, conscientes o no, y nos recuerdan que hay nuevos jerséis de nuestro color favorito en la planta dos.
Sector de la Seguridad, a los que hemos crecido con el cine de Ciencia Ficción, nos ha atraído siempre la idea de estar “controlados” por puertas de seguridad basadas en la biometría, el reconocimiento facial, sensores remotos, etc.. Según este estudio habrá hasta un 7,7% de implementación, el cual se me antoja todavía una cifra baja, francamente.
Finalmente, el Sector del Transporte, en este caso Amazon, Google, Microsoft e incluso Facebook, ya están haciendo grandes esfuerzos en este sentido. Los Drones, los coches autónomos y que como poco ya se aparcan solos, son una realidad.
Al ya “antiguo” servicio de geolocalización del GPS, gracias a la conexión a internet se pueden añadir múltiples aplicaciones que hacen que sepamos en todo momento las cuatro preguntas vitales que todos nos hacemos muchas veces al día, ¿Qué? ¿Dónde? ¿Cómo? Y ¿Cuándo? ¿Su implantació actual?
Un todavía escueto 4%, pero con una tendencia también creciente en poco tiempo. Para ello veremos Ciudades Enteras conectadas, el famoso ya concepto de SmartCity.
A algunos les brillará los ojos solo con pensarlo y a otros se les pondrá el pelo de punta, pero hay una verdad innegable, nos guste o no, vamos a eso, o mejor dicho, estamos ya
Para todo ello, como ya hemos comentado, El Internet de las Cosas, se vale del Big Data y del Cloud Computing, (de lo que pronto hablaremos en más profundidad) conceptos que ya todos manejamos para entrar en un nuevo paradigma tecnológico y social, donde todos y todo estará conectado a la red.
No en vano, otros estudios, como por ejemplo el de la empresa Gartner, creen que para 2020 puede que haya ya en el mundo aproximadamente 26 mil millones de dispositivos con un sistema de adaptación al Internet de las cosas.
Lo cual quiere decir que cada uno de nosotros tendrá no menos de 6 o 7 cosas conectadas a la red. Nuestro móvil, nuestros 3 o 4 Wearables, nuestra SmartTV, etc…
Por otro lado, con la próxima generación de aplicaciones de Internet (protocolo IPv6) se podrían identificar todos los objetos, algo que no se puede hacer con IPv4. En otras palabras, este nuevo sistema sería capaz de identificar instantáneamente por medio de un código a cualquier tipo de objeto.
En Citihood somos conscientes que todos estos cambios están ya alterando, no solo la forma como nos comunicamos, si no nuestro entorno más inmediato y seguimos desarrollando procesos tecnológicos que nos permitan adaptarnos a esta nueva realidad.
Nuevos protocolos, nuevas aplicaciones y nuevos desarrollos que nos hacen sentir que nuestro trabajo, es el más apasionante de los trabajos, en el momento más decisivo de la historia moderna.
Somos tecnólogos y desde este blog estaremos a la vanguardia de lo que pasa en este mundo que Sir Tim inventó hace un par de décadas y al que le queda una larga y apasionante historia que escribir.
Internet seguirá mudando su piel y estaremos allí para contártelo.
Y recuerda nos vemos en la red.